Publicado en Diario de Navarra (22/2/2020)

El jueves intentaron entrar en nuestra casa .Y lo mejor de todo es que fue a plena luz del día y con todos nosotros en casa. ¿Primera reacción? Incredulidad y miedo, para qué os voy a engañar. También miedo. Las emociones se apoderaron de nosotros. ¿Cuál fue la segunda? Una llamada al cerebro: ¿qué hacemos? Aquello no tenía ninguna lógica y no lo íbamos a consentir. Así que rápidamente organizamos la defensa de nuestro hogar, de nuestra familia. Uno, impedir que el intruso entre. Dos, intentar atraparle, ¡qué ilusos! Se las saben todas… Tercero, dar parte a las autoridades competentes… Bueno, pues esto es exactamente lo que pasó el jueves día 13 cuando la Ficha C15.1 del Programa Skolae quiso entrar en casa. Cuando nuestra hija de 8 años vino pidiéndonos una foto con papá haciendo algo. ¿Pero haciendo qué? ¿Montando en bici? “¡No, mamá! Haciendo las cosas que hacen las mamás y que los papás no hacen. Y luego tenemos que escribir una carta a papá para que aprenda lo que tiene que hacer”. No. Así no. En mi casa no va a entrar este intruso.

Protegiendo lo que más queremos, lo que más nos importa, conseguiremos detener a los intrusos. Hoy se llama Skolae y mañana puede que cambie de nombre. Nuestra alarma está activada. ¿Y las suyas? Ánimo, activad las alarmas.

Arancha Carrero, madre de familia numerosa y Presidenta de FamiLiaE

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